El bótox o toxina botulínica es una sustancia que impide temporalmente el movimiento de un músculo. Estas inyecciones son a menudo utilizadas para suavizar las arrugas de la cara pero también pueden ser utilizadas para diferentes problemas, como los espasmos musculares, la vejiga hiperactiva o incluso para prevenir la migraña. En nuestra área de Medicina estética en Sevilla la Nueva podemos ayudarte con cualquiera de ellos.
El bótox se extrae de una bacteria que purificada en laboratorios y bajo estrictos controles se utiliza para fines médicos.
Es importante recalcar que el bótox no es permanente. Esta sustancia hace que nuestros músculos no puedan contraerse y de esta forma obtener los resultados deseados, aunque su efecto durará entre 6 y 12 meses, según las personas.
Dentro del campo de la medicina estética su uso más frecuente en la de suavizar las arrugas generadas por la edad.
Existen dos tipos de arrugas: las arrugas dinámicas y las líneas y arrugas muy tenues.
Las arrugas dinámicas se producen por el movimiento de los músculos de la cara cuando uno sonríe, se ríe o entrecierra los ojos. A menudo se encuentran alrededor de los labios, en la frente y entre las cejas. También están las “patas de gallo” en la esquina de los párpados. Todos nacemos con arrugas dinámicas pero, a medida que envejecemos, estas arrugas se profundizan y son más fáciles de ver. La toxina botulínica puede utilizarse para hacer que estas arrugas dinámicas sean menos visibles.
La mayoría de personas no sienten dolor durante el procedimiento aunque, en ocasiones, se puede realizar alguna técnica anestésica, como por ejemplo una crema; o frío/vibración para no sentir el procedimiento.
Una vez realizado se recomienda no frotar ni masajear la zona en 24 horas y podrás retomar tu actividad inmediatamente después de que finalice el procedimiento.
Si tienes cualquier duda no dudes en contactar con nosotros y trataremos de resolvértela.
Nos vemos!