La fisioterapia deportiva es una de las muchas especialidades de la fisioterapia a través de la cual se busca la rehabilitación, la atención y la prevención de deportistas amateurs y profesionales, así como mostrar unas correctas directrices a aquellos pacientes que practican actividad física y quieren hacerlo de forma segura.

Así, la fisioterapia deportiva abordará las lesiones del aparato locomotor de los deportistas.

Objetivos fisioterapia deportiva

Tras conocer qué es la fisioterapia deportiva vamos a enumerar y explicar cuáles son sus principales objetivos.

  1. Acortar el tiempo de recuperación. Para conseguirlo fundamental conocer el tipo de patología que ha sufrido el paciente, así como los límites fisiológicos, sin olvidar las articulaciones y estructuras vecinas de la parte lesionada. El tejido necesita unos plazos determinados para regenerarse pero el fisioterapeuta puede ayudar a acelerar esos tiempos.
  2. Adaptar el cuerpo al entrenamiento. Empezar a entrenar cualquier tipo de deporte implica promover unas condiciones óptimas del sistema músculo-esquelético para obtener el máximo de beneficios.
  3. Minimizar los factores de riesgo. Si queremos reducir los riesgos y los síntomas más comunes de una posible lesión es importante practicar de la forma correcta la actividad física.
  4. Evaluar la situación. Saber decidir si el paciente puede volver a hacer deporte o aún no, reduciendo posibles recaídas en el futuro.
  5. Prevenir lesiones. Esta es una de las tareas más importantes del fisioterapeuta deportivo y una de las menos conocidas. El profesional de la salud ayudará al deportista en la prevención de lesiones.
  6. Mejorar la calidad de vida. En las personas de edad media que siguen practicando deporte el papel del fisioterapeuta puede ayudar a mejorar la calidad de vida del paciente deportista.